La Comunidad Valenciana, tierra de historia, cultura y belleza natural, también es hogar de una rica tradición vitivinícola que merece ser explorada. El enoturismo, una experiencia que combina el disfrute del vino con el placer de descubrir nuevos lugares, es una opción irresistible para los amantes del buen vivir.
Te invitamos a explorar la mágica fusión entre el vino y el turismo en la Comunitat Valenciana, pero las experiencias que venimos a ofrecerte todavía van más allá: ¿te imaginas despertar entre viñedos?
Cada vez cuesta más hacer regalos que sorprendan o vivir situaciones que de verdad sean únicas, pero la Coomunitat Valenciana no deja de ofrecernos nuevas experiencias. En esta ocasión queremos proponerte algunas relacionadas con el enoturismo pero totalmente diferentes y originales.
¡Ya tenemos la Navidad a la vuelta de la esquina! Primero de todo esperamos que pases unas felices fiestas y que puedas comenzar el año 2024 de la mejor manera posible.
La Comunidad Valenciana, un destino famoso por sus playas y su rica historia, es también un paraíso para los amantes del vino. Con su clima mediterráneo, tierras fértiles y una tradición vitivinícola arraigada, esta región ofrece una experiencia única en enoturismo que deleita todos los sentidos.
Explorando Viñedos
La ruta del vino Utiel-Requena es amplia y transcurre por diversos municipios que ofrecen diferentes posibilidades para poder disfrutar del mejor vino. Tienes la oportunidad de conocer el corazón del viñedo de la Comunidad Valenciana a través de las experiencias que te proponemos a continuación.
Degustar la Comunitat Valenciana a través de sus vinos es posible, y es que la humedad del mar, su particular clima, las temperaturas y su singular orografía hacen de sus vinos caldos con actitud, potentes y únicos que no dejan indiferente al visitante que lo degusta. Septiembre es una gran época para que te apuntes a las experiencias que te proponemos a continuación:
La Asociación Española de Ciudades del Vino (ACEVIN), confirma la recuperación del 80,85% de las cifras previas a la pandemia. Y es que el enoturismo se ha impuesto como una vía clave capaz de impulsar la economía de las zonas vitivinícolas y que además, apuesta por trabajar bajo el foco de la sostenibilidad.
