La Fuente Real de la Trinidad, una fuente histórica y ornamental, construida en el siglo XV, época en la que Calixto III era solo un niño. Está situada en la Plaça de la Trinitat en Xàtiva. Fue declarada Bien de Relevancia Local.
La Fuente Real de la Trinitat, rematada por una copa piramidal de 8 lados, preside la plaza que bautiza. Es uno de los lugares con más encanto del núcleo antiguo. Fue construida en 1403, aunque la información oficial se perdió con el incendio del archivo de la ciudad en 1707. Se restauró durante el siglo XVIII y, posteriormente, en la década de los 80 del siglo XX, empezó a formar parte del Conjunto Histórico Artístico de la ciudad.
Es una fuente que ha servido como modelo para la construcción de otras fuentes posteriores. Se compone de una taza de planta octogonal, en cuyo centro se levanta una columna con forma de prisma. Ésta se abre para formar la cara inferior de la copa, una copa adornada con tracerías ciegas y que queda separada del tambor por el bocel. El tambor es también octogonal y en sus caras presentan esculpidos los escudos de Xàtiva y Aragón. Como remate, una pirámide adornada con filas de ganchillo y actualmente coronada con un pequeño adorno que sustituye al original: una imagen de Santa Lucía.
Es en este espacio donde quedan los caños, que vierten de forma permanente y a través de vasos comunicantes agua procedente del Manantial de Bellús. La acción del agua ha erosionado aristas y eliminado el policromado con que lucía la fuente en sus primeros tiempos.
Esta fuente está considerada como la más antigua no solo de la ciudad, sino también de la Comunidad Valenciana, además de ser una de las pocas fuentes de estilo gótico que quedan en España.