El Museo Municipal de Alzira (MUMA), inaugurado en diciembre de 2008, realiza un recorrido por la historia y la cultura del municipio de Alzira y la comarca de la Ribera del Xúquer a través de cinco bloques temáticos: cartografía, arqueología, historia, bellas artes y etnología. La sede del museo está situada en el centro histórico de la ciudad, conocido como la Villa de Alzira, conjunto histórico declarado Bien de Interés Cultural.
El Museo se encuentra en la Casa del Empeño, un caserón gótico-renacentista de los siglos XVI-XVII, antiguo depósito de carbón, conocido por haber sido “Montepío de Labradores de la Real Villa de Alzira y demás pueblos agregados”.
El 8 de marzo de 1777 el Ayuntamiento aprobó constituir un Montepío para defender a los agricultores de la seda, ante las adversidades económicas, frente al prestamista o al comerciante. El concepto se amplió a medida que se hacían las gestiones, incorporando a los recolectores (labradores y cosecheros). El ámbito no sólo era local, sino que también se beneficiaban las localidades de Algemesí, Guadassuar, Alcudia, Alberic, Alcocer, Gavarda, Pujol y Benismulem. A partir de septiembre de 1779 empezó a funcionar con el compromiso de atender las necesidades de “los labradores y cosecheros de arroz, seda y trigo”.
El inmueble ha sido rehabilitado para instalar las nuevas dependencias del museo. Anexo a él, se ha incorporado un cuerpo de nueva construcción con amplias salas que en breve se abrirán al público.
El museo cuenta con gran cantidad de elementos etnográficos relacionados con la seda, aunque en la actualidad sólo una pequeña parte se encuentra expuesta. Se prevé que la historia del sector sedero en Alzira tendrá gran protagonismo, ya que se pretende abrir toda una nueva sección sobre usos y costumbres de las industrias más importantes para la localidad. Así, por ejemplo, se expondrá una andana sedera restaurada que en la actualidad no puede mostrarse por falta de espacio. Los fondos también incluyen una buena cantidad de tejidos de seda como terciopelos y tafetanes, muy posiblemente elaborados con seda de la propia localidad, o una hiladora. También se conservan objetos curiosos como papeles de seda para envolver naranjas, uniendo así, en un único elemento, los dos cultivos más característicos de la Ribera.
Además el Museo dispone de una biblioteca especializada y de un archivo gráfico para la consulta y el estudio de escolares, investigadores e interesados en general.