El Museo Catedralicio de Segorbe es una institución que se inauguró en 1949, debido a la destrucción de patrimonio artístico ocasionado tras la guerra civil de 1936. Pero tras un largo proceso de recuperación llevado a cabo por el Cabildo se pudo conseguir la exposición del legado cultural.
El museo pese a encontrarse en la Catedral Basílica de Segorbe, se agrupa como tal en los claustros alto y bajo, las capillas anexas y otras salas de la catedral. Y desde 1994 está integrado en la red de museos de la Generalitat Valenciana, y le fue reconocido el premio de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia por albergar una de las colecciones de arte más representativas del entorno valenciano.
Este emblemático museo es considerado como uno de los más importantes del arte sacro en la Comunidad Valenciana, debido a que, recoge una gran colección de pinturas, esculturas y orfebrerías con un gran valor histórico y artístico de los siglos XV al XVIII.
El contenido del museo oscila entre los siglos XIV- XVI donde destacan obras del gótico valenciano internacional con artistas como Miquel Alcanyís, Jaume Mateu o Gonçal Peris, el ciclo hispano-flamenco del siglo XVI con artistas como Joan Reixach, Maestro de Segorbe o Maestro de Perea y la pintura valenciana del siglo XVI con artistas como Francisco de Osona, Paolo de San Leocadio o Antoniazzo Romano. Las dos más representativas de las obras son la 'Madonna con niño' realizada en mármol de Carrara por Donatello y las tablas del gran retablo mayor de Vicente Macis y Juan de Juanes.
A su vez, el museo reúne tejidos en sedas y bordados propios de los siglos entre el XIV y el XIX y mobiliario clásico con arcones, puertas y armarios donde resalta la puerta dorada del claustro bajo o la urna relicario de San Félix.