La Comunitat Valenciana está considerada una de las zonas europeas con mayor diversidad de mariposas. Se ha registrado la asombrosa cifra de 159 especies de mariposas. Esto supone el 72% de todas las especies que se encuentran en la Península Ibérica.
La clave de esta diversidad se debe a su variedad de hábitats.
Incluso
En Gandía encontraremos la primera microrreserva de mariposas, situada en el paraje de Parpalló-Borrell, hogar de un gran número de ejemplares de esta especie. Un espectáculo de la naturaleza cuyos ejemplares son cambiantes según la estación del año en la que nos encontremos.
Si nos trasladamos hasta el municipio de Sot de Chera, encontraremos el oasis de las Mariposas, un espacio libre creado especialmente para la cría de mariposas y otros polinizadores, que son símbolos de la buena salud ambiental del territorio y que colaboran con la conservación y preservación de la flora y la fauna autóctonas.
La Serra de Mariola, el carrascal de la Font Roja o el macizo del Penyagolosa son otros entornos naturales donde se puede disfrutar de una gran diversidad de mariposas.
Otra de las actividades que demandan cada vez más los ecoturistas es la observación de odonatos, que incluyen tanto a libélulas como a caballitos del diablo. Y la Comunitat Valenciana aporta la posibilidad de observación de 60 especies de odonata y el número sigue aumentando con la colonización de muchas especies africanas, a las que hay que sumar incluso alguna nueva especie nunca antes identificada.
Una vez más, la diversidad de hábitats es la característica que hace de la Comunitat Valenciana un destino ideal para quienes buscan esta actividad turística, para la que hay expertos guías que pueden acompañar en estos descubrimientos.